RECETAS
Huevos revueltos cremosos
Los huevos revueltos cremosos con salmón ahumado son una de las versiones más conocidas y mucho más completas de uno de los desayunos más apetecibles que existen.
El revuelto de huevos, también conocido como huevos brouillés, es un clásico de los desayunos americanos. Gracias a su alto valor nutricional, rico en vitaminas y minerales, son un desayuno energético perfecto para comenzar el día. Además, es una opción saciante, deliciosa y muy sabrosa para disfrutar tanto en la comida como en la cena.
Prepararlos parece fácil, ¡y lo es! Sin embargo, si quieres unos huevos revueltos perfectos, se requiere técnica para evitar acabar preparando una tortilla francesa. Por ello, hoy te revelamos todos los trucos y te explicamos cómo cocinar un revuelto cremoso para que te quede especialmente jugoso y esponjoso sin necesidad de usar leche, crema o nata.
Se pueden comer solos, pero también se preparan con diversos ingredientes como jamón, carne picada, champiñones, cebolla, ajetes, espinacas, calabacín, espárragos, queso o atún, entre otros. En este caso, te proponemos emplearlos como una deliciosa base para servir nuestro salmón ahumado. Una combinación riquísima e irresistible.
En este punto, es posible que te estés preguntado cuáles son las diferencias con los huevos pericos. En realidad, es la misma receta que los huevos revueltos cremosos; simplemente se conocen como pericos cuando se cocinan con tomate, cebolla y, en algunas ocasiones, con cilantro. Estos son típicos de Venezuela y Colombia y suelen comerse directamente de la sartén o usarse como relleno de arepas.
Si buscas más recetas fáciles con huevos, te recomendamos la tortilla vaga con salmón ahumado o nuestros conocidos huevos benedict con salmón ahumado.
- 95 g de Dados de Salmón Ahumado
- 3 huevos (preferiblemente ecológicos)
- Sal
- 1 cucharada pequeña de AOVE
- 1 rebanada de pan de molde (opcional)
El primer truco para que esta receta nos quede perfecta es asegurarnos de que los huevos estén a temperatura ambiente.
Añadimos una cucharada pequeña de AOVE en una sartén antiadherente y calentamos a fuego bajo. Vertemos los huevos, removemos y añadimos un toque de sal. Cocinamos durante 5 segundos hasta que se forme una capa ligeramente cuajada. Volvemos a remover y dejamos reposar unos segundos. Repetimos el proceso hasta que los huevos estén cremosos. Te recomendamos mezclarlos utilizando una cuchara o espátula, preferiblemente de madera.
Dejamos que los huevos revueltos se atemperen y, opcionalmente, añadimos pimienta negra molida al gusto. Si lo preferimos, los servimos sobre una tostada o un pan crujiente.
Sacamos los dados de salmón ahumado de la nevera y los colocamos sobre los huevos revueltos cremosos. Es importante que el revuelto esté templado para que el salmón ahumado mantenga su sabor y aroma.
- Pescado
- Huevos
