RECETAS
Ensalada de patata con salmón ahumado

La ensalada de patata, conocida coloquialmente como ensalada de papas, es una de las más habituales durante el verano por su ligereza y frescura. Esta receta se popularizó con la llegada de la patata a Europa a finales del siglo XVI. Fue entonces cuando comenzamos a emplearla en una gran variedad de platos debido a su versatilidad y sus valores nutricionales. Hoy en día, es el ingrediente estrella de recetas de nuestro día a día como las ensaladas frías y los huevos rotos.
Este tubérculo se consume en todo el mundo y, de hecho, existen más de 7.000 tipos de patatas con diferentes características organolépticas y texturas. Por ello, según si las vamos a freír, hervir o asar, elegimos una variedad u otra. Para la ensalada de patata, normalmente usamos patata hervida.
Las mejores variedades para cocer son las rojas, monalisa y fingerling, entre otras. Todas ellas destacan por su alto contenido en humedad y por contener poco almidón. Esto quiere decir que, durante la cocción, los gránulos tienden a unirse, lo que hace que la textura sea firme y podamos cortarlas fácilmente sin que se deshagan.
Recetas de ensalada de patata
En cada país, la ensalada de patata es completamente diferente. En Alemania, por ejemplo, se conoce como Kartoffelsalat, en Italia elaboran la pantesca y en España, la patata hervida es el ingrediente principal de multitud de ensaladas, como la murciana, la malagueña o la campera. También podemos acompañar las patatas cocidas con atún, pulpo, bacalao y, por supuesto, con salmón ahumado.
Desde Domínguez queremos mostrarte nuestra versión de la ensalada de patata con salmón ahumado, una receta que sorprende por su facilidad y sabor. Si la aliñamos con un toque de nuestras Salsas Frescas, tenemos en un plato fresco, sencillo y muy apetecible. Esta ensalada de patata podemos disfrutarla ligeramente templada e incluso fría, como aperitivo o plato principal. Es perfecta para llevar de picnic, a la playa o la montaña, ya que tenemos la posibilidad de prepararla el mismo día o un día antes.
- 3 patatas grandes (o 5 medianas)
- 150g de salmón ahumado
- 4 huevos
- 50g de mézclum de lechugas
- Sal
- AOVE
Lavamos las patatas y las cocemos con una pizca de sal durante 30 minutos, o hasta que estén blandas. Podemos pincharlas con un cuchillo para comprobar si ya están cocidas. Las sacamos del agua caliente y las dejamos templar.
Mientras tanto, en otro cazo más pequeño hervimos los huevos frescos. Los cubrimos con suficiente agua y los cocemos durante 10 minutos. Los retiramos del agua caliente y los enfriamos en agua fría. Una vez atemperados, quitamos la cáscara y cortamos en rodajas finas.
Cuando las patatas estén a temperatura ambiente, retiramos la piel y las cortamos en láminas de 1 centímetro, intentando que todas nos queden con el mismo grosor.
Servimos las patatas cocidas como base de la ensalada y cubrimos con el huevo cocido previamente laminado. Sobre el huevo, colocamos el mézclum de lechuga e incorporamos el aliño al gusto, una cucharada pequeña de AOVE o un toque de una de nuestras salsas frescas.
Antes de presentarla, incorporamos las lonchas finas de salmón ahumado recién sacadas de la nevera.
- Huevo
- Pescado
- Mostaza